Comienza septiembre y con él llega la vuelta a la rutina. Este cambio de hábitos nos puede generar malestar que, si dura, podría convertirse en depresión post vacacional.
Todavía quedan algunos afortunados a los que les quedan vacaciones o las toman ahora en septiembre, sin embargo, para la mayoría de nosotros, el periodo estival ha terminado ya y debemos reincorporarnos a la rutina: trabajo, oficina, colegio, labores domésticas… En ocasiones, nos puede costar un par de días el cambio pero si esta transición se alarga durante 10 – 15 días y nos supone síntomas como ansiedad, fatiga, dificultad para adaptarse y malestar general… Puede que estemos sufriendo depresión postvacacional.
¡Ánimo! Aplicando estos consejos y con un poco de paciencia lograrás superar este proceso.
Date tiempo
Vuelve a casa un par de días antes de incorporarte al trabajo. Puede parecer perder tiempo de vacaciones, pero así no se te juntarán compras y lavadoras con la vuelta a la oficina, y evitarás una buena cantidad de estrés.
To do list
Septiembre es una especie de Año Nuevo, y aunque cualquier día es bueno para abrazar nuevos hábitos u objetivos, este mes te puede servir como empujón para decidirte finalmente a apuntarte a esa clase de baile que tanto te apetecía, decidirte a preparar unas oposiciones o llevar un estilo de vida más sano. Plásmalo en una lista realista.
No te olvides del deporte
Practica ejercicio a diario, a ser posible en espacios al aire libre, que te ayudará a estar en contacto con la naturaleza y a despejarte, ahora que todavía hace buen tiempo. Realiza actividades adaptadas a tu nivel y gustos: caminar, ir en bici, correr, bailar…
Sé agradecida
Da gracias por todo lo bueno que tienes y agradécelo, y cuida de tu esfera personal: no te lleves el trabajo a casa.