Andrea Martínez es la marca (y el nombre de la diseñadora) que nos ha enamorado esta semana. Este pequeño estudio está en Barcelona y todas las piezas se elaboran allí, en ediciones muy pequeñas , porque se hacen de una en una, y no en stocks. Te contamos más.
Los monos
Hasta nosotras nos hemos dado cuenta. Últimamente, no paramos de hablar de monos. Estamos obsesionadas, por lo visto. Este modelo es a rayas blancas y negras y fabricado en algodón. El detalle de los botones en forma de manzana de color rojo, nos encanta. Por el tejido, por el corte y las delanteras nos parece comodísimo.
Las camisas
La colección de camisas y blusas es divertídisima. Nos gusta especialmente la colección de primavera / verano. Porque los tejidos son ligeros y porque los cortes son favorecedores y frescos. De todas las prendas, esta camisa con estampado de planetas es nuestra favorita. Es 100% viscosa y la caída que hace es sensacional. Además, los botones están ocultos. ¡También está la versión vestido!. In love.
y hablando de vestidos…
¿Qué tendrán los vestidos de rayas marineras para que nos gusten tanto? El estampado, lo primero. Pero es que este, además, tiene bolsillos, una lazada en la espalda y el largo midi. Pero espera, que esto es lo mejor. Al tratarse de piezas confeccionadas a mano y de una en una, si necesitas cambiar el largo del vestido, puedes encargarlo más o menos corto.
Las camisetas
Siguiendo la misma línea delicada y con aires naif que os hemos mostrado hasta ahora, la tienda de camisetas no le anda detrás. Nuestra favorita es esta en azul klein, con canesú en el lado derecho. Como toda la colección, está confeccionado de forma artesanal en talleres de Barcelona.
Producción bajo demanda
Andrea Martínez es nombre propio, marca y, sobre todo, un sello. «La mayoría de las prendas que veis en la web se producen una a una. No quiero trabajar con stocks. Mis producciones son pequeñas y de algunos modelos sí que produzco unas cantidades establecidas para poder agilizar ventas pero la mayoría de prendas se fabrican cuando hacéis el pedido. Este modo de producción es muy costoso pero es sostenible», cuenta la diseñadora en Instagram.
