No todo es glamour y perfección según los cánones de la moda. Kim Kardashian, como muchas otras personas, fue diagnosticada en 2011 de psoriasis, afección que no tiene cura.
Que sufre de psoriasis no es ningún secreto. La enfermedad es crónica para quien la padece y se hereda de forma genética. Los síntomas son inflamación de la piel con lesiones rojizas que se acompañan, casi siempre, de unas incómodas escamas.
Desde hace unos meses, Kardashian empezó a compartir en redes sociales los avances de la enfermedad y los tratamientos que sigue para minimizar el impacto en su cara y otras partes del cuerpo como las piernas.
Este fin de semana, Kim publicó por primera vez una foto de ella misma mostrando la psoriasis que sufre en su piel. Como ha decidido no esconderlo nunca más, ha vuelto a inmortalizar su problema facial en Instagram.
«Morning psoriasis» (Psoriasis mañanera), rezaba la Kardashian en esta imagen sin maquillar, en la que podemos ver muy claramente las marcas de la enfermedad.
¿Qué es la psoriasis?
La psoriasis es una enfermedad en la que las células de la piel se acumulan para formar escamas y manchas secas que producen comezón.
Una de sus causas es el estrés nervioso, razón por la que la empresaria decidió respetar cada día sus horas de descanso.
El asunto de la psoriasis crónica es un tema que ha sido recurrente a lo largo de los años para la estrella del ‘reality’, ya que a principios de febrero rebatía a un periódico en Twitter que aseguraba que Kim sufría de acné, nada más lejos de la realidad que ahora muestra sin complejos.
La modelo ha hecho de todo para mitigar su enfermedad, desde probar ungüentos, cremas y tratamientos pero sin resultado.