Te pones tu blusa favorita, sales a comer con tu amigos y ¡horror! te manchas. Seguro que te ha pasado alguna vez. Pero no te preocupes que todo tiene solución, sobre todo porque desde Cachet te enseñamos a eliminar las manchas de tu ropa para que parezca que en tu vida te has manchado la ropa.
Actúa rápido, consigue resultados
Cuanto antes te pongas manos a la obra, más sencillo será eliminar las manchas de tu ropa. ¿Por qué? Fácil, cuanto más tiempo le des a la mancha a penetrar en el tejido, más difícil será sacarla después. Si por el contrario comienzas a eliminar la mancha rápidamente, es más probable que no le de tiempo a «calar» en el tejido.
Por lo que, si nos manchamos, es muy importante no dejar la prenda manchada en el cesto de la ropa «para luego». Ya que, además de incrustarse más, es probable que el olor de esa mancha se pegue al resto de prendas del cesto.
Polvos de talco
Si, otra vez los polvos de talco. peor qué vamos a hacerle si son un producto casi mágico. Además de los mil y un beneficios que tienen para ti y tu salud, también son una maravilla para sacar esas manchas rebeldes de la ropa.
Y es que, por un lado, seca la zona, haciendo que esas manchas no permeen en las capas más internas de la ropa y, por otro, absorberá todos los olores que puedan quedar en la prenda. Asegurando así que vuestra ropa huele tan bien como vosotras.
Agua carbonatada contra las manchas
Del mismo modo que los polvos de talco, el agua carbonatada es una gran aliada a la hora de eliminar las manchas en la ropa. Ya que, de forma parecida a los polvos de talco, el agua carbonatada hace que las manchas no se «agarren» a la ropa.
Aunque ojo con usarla en prendas con materiales delicados como la seda, ya que podría ser peor el remedio que la enfermedad. Y ese top tan ideal con una gotita de vino puede terminar en la basura.
Limón y bicarbonato contra las manchas de sudor
Si nos ponemos mucho la ropa, lo más probable es que las camisetas terminen con una mancha nada estética en la zona de la axila. Algo especialmente observable en la ropa de color blanco. La culpa de esto la tiene el sudor, claro. Sin embargo, hay una solución que dejará tus básicas como nuevas.
Mezcla en un pequeño recipiente bicarbonato de sodio y algo de zumo de limón. Una vez tengas «la mezcla» aplícala en la zona amarillenta y espera unos minutos. Después mete la prenda en la lavadora como lo harías normalmente y voilá, adiós manchas.
Imágenes: Unsplash y Pixabay