Los tacones nos encantan a todos, eso es algo indiscutible. Sin embargo, y muy a nuestro pesar, hay muchísimas ocasiones en las que este tipo de zapatos hacen más mal que bien. Sobre todo si se trata de veladas largas o a la hora de salir de fiesta. Por eso mismo te enseñamos algún truquillo para que cambiar los tacones por zapatillas no te haga perder el glamour.
Aligera tus looks con gabardina
Si, al principio puedes pensar que una gabardina y tus sneakers favoritas no pegan ni con pegamento, pero nada más lejos de la realidad. Y es que, si sabes combinar, podrás darle un toque fresco y moderno a un look tradicional.
Las mejores opciones en estos casos son gabardinas algo más coloridas y atrevidas y unas sneakers que llamen la atención. De esta forma, el contraste conseguirá hacer milagros con nuestro outfit.
Las zapatillas blancas siguen siendo tendencia
Si eres fan de las zapatillas blancas, estás de enhorabuena. Porque siguen siendo de los más visto en el terreno de la moda. Y si encima lo tuyo son los outfits «all-black» entonces tienes la combinación más ganadora que podemos pensar. Ya que el contraste del blanco con el negro queda de muerte.
También funciona en el sentido contrario, ya que unas sneakers negras junto a un conjunto blanco es, del mismo modo, una combinación ganadora.
Modernizando los blazers
Un blazer ha sido, tradicionalmente, una prenda más que seria y acompañada de zapatos igualmente serios. Hasta, claro, que a alguien se le ocurrió cambiar los tacones por zapatillas y revolucionó esto de la moda. Pero, ¿de verdad funciona? Si, de verdad, te lo prometemos.
Si a eso le añadimos unos vaqueros baggy o unos mom jeans además de las sneakers conseguiremos un look elegante pero informal. Aunque siempre podemos darle un toque más urbano con una camiseta de tu grupo favorito.
Pon unas plataformas en tu vida
Del mismo modo que los tacones, unas buenas zapatillas con plataforma pueden ser la clave para unos conjuntos ideales. ¿La razón? Que, sobre todo con faldas y vaqueros, dan un toque «extra» a tu outfit. Mejor todavía si tus zapatillas son lo suficientemente llamativas como para ser la pieza central del look.
Y es que no hay nada que mole más que llevar esas zapatillas que sabes desde el minuto en el que te las pones que van a ser el centro de atención allá donde vayas. Y si, a nosotros también nos encanta la sensación.