¿A quién no le gustaría lucir un rostro perfecto y radiante? La mayoría de nosotras no nacemos con una piel perfecta por defecto. Es más, a menudo pensamos que para conseguir una piel perfecta tenemos que invertir mucho tiempo, productos y dinero.
Olvídate del salón de belleza
Pero no te equivoques. Para conseguir un rostro brillante no tienes por qué pasarte horas en un centro de belleza y gastarte miles de euros. Puedes conseguirlo perfectamente desde el salón de tu casa. Te contamos qué tienes que hacer para lucir un rostro radiante.
Cuida tu piel desde dentro
Comenzaremos por la parte más importante. Y es que, debes entender que para tener la piel perfecta es fundamental cuidarla desde dentro. Es decir, no solo conseguiremos un rostro impecable con productos para ello, sino que, si para empezar no tenemos una base limpia e hidratada, no llegaremos a ningún lado.
Presta mucha atención a los cuidados de tu piel, y encuentra lo que vaya mejor contigo, y también lo que no. Un aspecto muy importante dentro de este bloque de cuidados es saber qué ingredientes tienen que tener los productos que te echas.
La vitamina C
Es decir, no es tan importante el producto en sí, sino más bien el ingrediente clave. Por ejemplo, uno de los ingredientes esenciales para tener una piel de 10 es la vitamina C. Va a ser tu mejor aliada a partir de ahora.
Puedes utilizar cualquier producto que contenga esta vitamina (no tiene por qué ser un producto caro). Es más, si prefieres puedes incluso hacerte tu propio producto casero. Te dejamos un sérum casero ideal para el rostro por aquí.
Los ingredientes naturales
Por lo general, los ingredientes naturales suelen ir perfectos para la piel, por lo que una buena opción es echarte una mascarilla una o dos veces por semana. Te dejamos varias recetas aquí, para que encuentres la que mejor vaya con tu piel.
El ácido glicólico
Además, puedes optar por buscarte un exfoliante químico, en vez de mecánico, que contenga ácido glicólico. Estos exfoliantes van genial para penetrar a fondo tu piel, además de deshacerse de las imperfecciones que puedas tener. Regula el sebo facial, se deshace de las arrugas pequeñita e incluso consigue afinar tus poros.
Esto último es clave para que tu piel se vea mejor, ya que las espinillas y los puntos negros pueden darle a tu rostro un aspecto apagado. Por todo esto es esencial que te laves bien el rostro tanto por la mañana, como por la noche.
Utiliza las manos para darte un masaje
También es importante la forma en que nos echamos los productos. Los automasajes manuales son maravillosos para la estimulación del riego sanguíneo. Por ejemplo, puedes aplicarte el sérum que hemos mencionado anteriormente con un suave masaje.
La clave de este masaje es que utilices tus manos desde dentro hacia fuera del rostro, y desde abajo hasta arriba. Luego, utiliza tus dedos con un gesto de tecleteo, y presiona las zonas de la frente, el mentón y las mejillas con las palmas. Te verás más despierta rápidamente.
Nuestro gran amigo: el iluminador
Por último, te dejamos algunos consejos para el toque «glow» final. Con estos obtendrás resultados más inmediatos. Un gran tip para que brilles con naturalidad es añadir una gotita de iluminador a tu crema facial diaria. Verás cómo te ves radiante de forma súper natural. Y desde luego no te olvides de darte un toque de iluminador antes de salir de casa.
Te recomendamos que te eches un poquito en las siguientes zonas: el hueso de las cejas, los pómulos, la nariz, el arco de cupido, y las sienes. También puedes optar por aplicarte un poco en la zona de las clavículas. Si aplicas un poco de producto justo por debajo, lograrás darle un extra de luz a tu rostro.
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